Que un tipo como Wert sea ministro es lamentable, que además lo sea de Educación y Cultura es un insulto para la Educación y la Cultura, pero pese a declaraciones deleznables como españolizar a los niños catalanes o quien no se paga la escuela es porque no quiere o en Educación no hay recortes sino reajustes, pese a ser el ministro peor valorado por los ciudadanos en la encuesta del CIS desde que ésta se realiza, pese a que incluso parece ser que sus compañeros de gabinete no le soportan, Wert no es el problema sino las políticas que aplica que responden al mismo plan que sustenta a todo el gobierno y que pretende, aprovechando la coyuntura de crisis generalizada, insistir en la brecha entre ricos y pobres y construir todo un entramado que abarca desde reducir nuestros derechos laborales a casi suprimir los servicios sociales con espíritu duradero.
Ya anticipábamos antes de las elecciones que el Partido Popular ahondaría en los recortes iniciados por Zp si ganaba las elecciones, más si cabe con mayoría absoluta. La puesta en práctica política es de manual: permitir que sean los ministros quienes se quemen aplicando e intentando defender medidas que atacan directamente a los derechos básicos de los ciudadanos manteniendo a Rajoy al margen para evitar su deterioro, con la idea de, avanzada la legislatura y pretendidamente superado lo peor de la crisis, recuperar un perfil más pólitico en el gobierno confiando en la poca memoria histórica que nos caracteriza para presentarse a las próximas elecciones como el partido que superó la crisis.
En este sentido Wert interpreta a la perfección su papel de tonto útil, las críticas se centran en él como individuo y se olvidan de que forma parte de un programa político. En Madrid tenemos un ejemplo claro, personalizamos las críticas en Esperanza Aguirre y su sustitución por González, con un perfil mucho más bajo, parace conformarnos aún cuando aplica exáctamente las mismas medidas perjudiciales para los ciudadanos que su antecesora. Sustituir a Wert hoy sería no un triunfo de la oposición que sólo podría explotarlo unas semanas, unos días incluso, por la inmediatez de los telediarios y sus consumidores ávidos de noticias nuevas, sino un triunfo para el propio Rajoy sustituyendo al tonto útil por otra persona de un perfil más amable que aplicase las mismas medidas. La ciudadania poco informada, la que se deja llevar por la fuerza de la costumbre y que también abunda en quienes se manifiestan contra Wert quedaría saciada con su caída cuando lo realmente necesario es la caída de todo el gobierno y no sólo de uno de sus ministros.
El árbol no nos deja ver el bosque como en la mayoría de los casos y nos equivocamos en personalzar, es caer en la trampa del gobierno. Es absolutamente necesaria la salida de Wert del gabinete pero no sólo la suya.
6 comentarios:
Todo esto tiene un nombre: fascismo.
Wert salía en la tertulia de Cuatro presumiendo de de que hablaba inglés muy bien, que ya ves tú qué cosa.
Es un ser abyecto carente de empatía,un tonto/listo útil a un proyecto de fascismo.
Anónimo, no te confundas Wert no es fascista, de echo nadie en el gobierno creo que lo sea. Simplemente usan su poder político e influencias para enriquezerse y beneficiarse personalmente, igual que lo hizo el gobierno de ZP durante 8 años. No os desvieis, los políticos de este pais se mueven detras del dinero no de ideologías.
Estoy de acuerdo anónimo, Ricky?, que Wert tiene tintes fascistoides pero insisto él no es el verdadero problema sino, Alfonso, las políticas de las que participa. Por supuesto que hay un contenido político e ideológico en el gobierno, como en los anteriores, se llama capitalismo y pretende una lucha de clases en la que gana la clase dominante, reducirlo todo a que los políticos son unos corruptos es parte del discruso fascistoide de desprestigio de la Política con mayúsculas. No podemos caer en eso.
No tiene nada que ver, es que he olvidado decirte en el mail que te acabo de enviar que te leas un libro: "desgracia" de J.M Coetzee.
Mi (no) aportación a este blog es que Wert es un ceporro.
S.
Claro, te doy la razón, es un tonto útil para un proyecto capitalista (el verdadeo problema), aunque podemos definir el estado actual como fascista, es decir, yo, voy con mi santo padre a una manifestación legal a clamar contra esta macro estafa (con toda la razón), y puedo terminar en hotel las rejas (tócate los cojones), cuando son ellos los que tendrían que estar en la cárcel. La impunidad existente es inverosimil, somos el hazmerreir de medio mundo.
Y particularmente a mi Wert, ya que hablamos de él ahora, me parece un individuo deleznable, a pesar de tiene una gran competecia en ese partido compuesto por empresarios pijos ávidos de dinero y poder a cualquier coste y además con muy mal gusto, por cierto.
Hola chicos, permitirme un cambio de registro en cuanto a la cultura, tanto la ética como la estética estarán en Jerez del 24 al 26 participando el XIV Congreso de la Fundación Caballero Bonald. Si os apeteciera, allí nos podríamos ver las caras.
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