jueves, 7 de junio de 2012

KATIA NO DUERME

hasta la flor más bella tiene espinas, 
todas las cartas de amor finales...

...dice buenas noches aunque quiere decir preferiría que dijeses algo pero su buena educación o que ya son demasiados años. Y algunas veces hasta le quiere y otras le siente tan cerca como entonces, pero las más es una maleta o los recortes que guarda en un álbum. Dice buenas noches y se da media vuelta y espera una respuesta que no llega, que bien podría ser la luz de la mesita o notar que el colchón se hunde un poquito de su lado, asi que cierra los ojos como si así no le viera aunque sigue viéndolo y a veces se levanta de la cama, pasea por el cuarto, busca un cigarrillo, se le queda mirando a los ojos hasta que la cortina de agua que todas las noches le difumina y le corre por la mejilla, pero dice buenas noches porque siempre le dice buenas noches y ya es una rutina más que un deseo, la certeza de que ya son las tres y la eterna promesa de que mañana guardará su foto, que ya han pasado cinco años desde que





Katia es la chica que patina, tenía diecisiete años entonces. Él es Sergey, su pareja de siempre. Como dice la canción, tras ganar la medalla de oro en Calgary 88 se casaron y fueron padres de una niña. Sólo cuatro años después, Sergey moría víctima de una enfermedad degenerativa. Hoy, se les sigue considerando una de las mejores parejas de patinaje artístico de la historia.

La canción es cosa de Antònia Font, el video de PirandelloRJ

2 comentarios:

rosicler dijo...

Bonita historia,perfecto desenlace.
Una abraçada

J. Oliva dijo...

La realidad siempre escribe mejores historias que nosotros, verdad?