martes, 20 de enero de 2015

APRENDIENDO A LEER

Nicolás está aprendiendo a leer. Es un proceso muy bonito que por esas cosas de la mente olvidamos al mecanizarlo. y es una pena porque si recordásemos cómo aprendimos a leer, seguro, disfrutábamos más leyendo. Me gusta sorprenderme con él cuando consigue enlazar varias sílabas seguidas. Me gusta verle cómo sonríe cuando lee una palabra completa, aunque no entienda el significado. Mari es pedagoga y trabaja mucho con él a través de juegos. Los fines de semana leemos el libro que le prestan en el colegio y pregunta qué pone aquí y repite la palabra como para no olvidarla. Imagina.
El otro día leíamos la palabra muñeco. Nicolás se trababa en la primera sílaba. Mi, decía. O Ma. O Me. Incluso Pa, ya puestos a probar. Consiguió superar la frustración a base de patatas fritas y bebidas refrescrantes...y yo dándole vueltas, ya sabes...
No será que en la mayoría de los casos leer es adivinar lo que pone? y si nos estamos limitando a probar sílabas hasta que las palabras que leemos dicen lo que queremos leer? Y si realmente no estamos entendiendo nada y cuando decimos aquí dice dice cualquier otra cosa que nunca entenderemos, que nunca leeremos, porque nos hemos equivocado al pensar que leer es juntar letras, es juntar palabras.
Fijate que ya puestos el método es bastante lógico: identificar las letras, identificar las sílabas, identificar las palabras, ahora bien, dime, realmente cuántos conoces que se han quedado ahí. Claro que ahora viene tener paciencia, Nicolás no es capaz aún de leer más allá de palabras muy sencillas y bien pensado ya se equipara al 90% de los lectores de nuestro país con lo que....




3 comentarios:

Anónimo dijo...

Como le llevéis bien llevado, con vuestros genes y vuestras pedagogías va a salir un premio Planeta en potencia.

Pero es verdad que en realidad lo que hacemos es ver letras juntas, categorizarlas como un todo, y entender cualquier cosa, aunque signifique la contraria. Como por ejemplo hoy que he leído: "Bárcenas saldrá de la carcel si paga una fianza de 200.000 euros", y lo que quiere decir, lógicamente, es que Bárcenas no saldrá de la cárcel hasta que cumpla integramente la condena que se merece.

Lo que pasa es que yo no sé leer bien porque fui a un instituto público, el Francisco de Goya...

Susana dijo...

qué guay, vaya momento!

J. Oliva dijo...

Bueno, en esas estamos, Ricky. No creo que los genes aporten mucho. Genial como siempre tu ironía, cosas de colegio público.
Un gran momento, S. ya lo creo