lunes, 10 de enero de 2011

QUÉ Y CÓMO APRENDEMOS

Al menos en teoría el qué debería responder a los intereses de la sociedad para que los alumnos puedan desempeñar-se como ciudadanos plenos, por ejemplo, cuando yo estudiaba en el instituto Informática era una asignatura opativa que yo no cursé mientras que hoy se integra en el curículo de Tecnología y es obligatoria en 1º, 3º y 4º de ESO. Es evidente que la Informática es una herramienta esencial en la actualidad pero qué ocurre con las asignaturas que, a priori, la sociedad no demanda? Qué pasa con Latín, por ejemplo, o Historia del Arte? o Filosofía? Tú y yo sabemos de lo esencial de estas materías, más en los tiempos que corren, sin embargo cada vez están más relegadas en el curriculo de secundaria respondiendo a la escasa demanda de la sociedad ante tales conocimientos (!!!!!) De nuevo el para qué estudiamos. ...para que los alumnos puedan desempeñar-se como ciudadanos plenos, decía un poco más arriba por lo que uno podría entender que estas materias, y otras que seguro se te ocurren, deberían ser imprescindibles, y sin embargo en mi instituto del año pasado, por ejemplo, las alumnas que decidieron continuar estudiando Humanidades en Bachillerato han tenido que cambiar de centro porque el suyo ya no ofrece esta opción, por minoritaria...
No estamos hablando de conocimientos absurdos o acientíficos (Se puede decir acientífico?) como el negacionismo o la presencia de extraterrestres en la construcción de las pirámides...estamos hablando de que los alumnos puedan desempeñar-se etc.
Entiendo que diseñar un curriculo debe ser realmente complicado, decidir qué debería saber un chico o una chica cuando acabe la ESO es una decisión que no me gustaría tomar pero esa decisión no debe caer en un grupo de burócratas sin experiencia en educación como hoy ocurre en nuestra comunidad, políticos que toman decisiones en función de intereses que en ocasiones responden más a intereses de partido que a intereses educativos. Por qué son ellos? Porque así lo hemos decidido nosotros. Cuando votamos, o cuando no lo hacemos, estamos eligiendo a nuestros representantes. Los actuales, los que hablan por nosotros porque así lo hemos decidido, han acordado, con nuestra connivencia, que ellos se encargan de estas cosas y que luego nos lo cuentan. Si se trata de formar ciudadanos responsables en la escuela, tal vez, asignaturas que forman para plantearse, para cuestionarse, para pensar fueran imprescindibles. Todos sabemos lo peligroso que resultaria, sin embargo, de ahí que mejor Informática que ya viene todo dado y sirve para encontrar un trabajo.
Ya lo sé, estoy rozando la demagogía por el lado de allá, como siempre, pero piénsatelo un poquito. Cuando yo estaba en el instituto elegíamos entre Ciencias o Letras, por qué no había una opción que fuera Ciencias y Letras? Por qué nos enseñan que existe uan enorme rivalidad entre ambas cuando no es cierto? Y por qué una tiene connotaciones relacionadas con el éxito y otra con el paro? Los estigmas, como los que todavía tiene la Formación Profesional, deberían ser nuetsro primer objetivo a destruir.
Mira, Raúl escribía, el mes pasado, en Monimony sobre cómo aprendemos, mencionando el informe PISA y llegando a interesantes conclusiones, como que el informe evalúa a los alumnos pero que estos son el resultado, también, de la labor de los docentes y en definitiva del sistema educativo. Cierto que el informe está viciado ya desde su origen cuando no tiene encuenta el entorno socio económico en el que se desarrolla la activida docente, pero puede ser útil como pnto de partida, bien enfocado. Raúl incluye, además, este fantástico video en el que se cuestiona si un centro educativo debe ser una fábrica de trabajadores en potencia. ¿Recuerdas cuando decíamos que la Universidad era una fábrica de licenciados? Pues coincidimos con Sir Ken Robinson que como tiene nombre inglés igual convence más.




(continuará, pero vete haciendo a la idea de que el resultado final es poco esperanzador a día de hoy. Aunque ya voy aprendiendo a pensar a largo plazo)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo estoy deseando envejecer para jubilarme y empezar a estudiar física o cosmología. Ahora entre el trabajo (que es lo contrario de lo que estudié), ver la tele y un afán consumista que no sé de dónde me ha salido, no tengo tiempo.

Cuando nos demos cuenta de que leer un buen libro es mejor que leer ocho best-seller de 1080 páginas; que sacar partido a una conversación interesante, que darse a los demás, que sentir la naturaleza, que sentir el arte, que viajar, que conocer, que hacerse preguntas, que compartir, que todo eso es mejor que ser uno de esos del montón que gana más que tú y vive para restregarte su coche nuevo...

rgsanmart dijo...

Totalmente de acuerdo... y el vídeo ¡buenísimo!

Esther dijo...

Hay muchas cuestiones en juego, entre ellas está la función de la escuela, los docentes, como propiciadores del espíritu crítico, del pensamiento crítico. El caso es que las herramientas pare esto surgen en muchas ocasiones de las humanidades que se deciden eliminar porque no dan dinero, porque encima a lo único que pueden llegar es a que los alumnos piensen por sí mismos. Fuera del currículo es más y más complicado que alguien se interese por estas materias.
Muy bueno el artículo

J. Oliva dijo...

Cuando nos demos cuenta de eso, Ricky, igual hasta somos un poco más libres.

Bienvenida, lmqfj Lástima que el video no ocupe toda la conferencia pero es interesantísimo, verdad? Además está muy bien hecho, igual te sirve para tu blog como expresión artística. Me alegro de que coincidamos totalmente (!!!)

benvinguda i molta gràcies pel teu comentari,Sigrid. Cierto que es difícil que fuera del currículo alguien se interese por las humanidades o las ciencias sociales, el problema, ya sabes, es que incluso en el currículo cada vez pesan menos. No es que queramos relegar conocimientos de otras áreas sino poder tener las mimas oportunidades.

Quiero dar las gracias, también, a Maria José, que colgó en su Twitter un enlace con Para qué estudiamos y ayer el blog recibió muchas más visitas de lo habitual.

Este fin de semana, posiblemente, saldrá la tercera entrega de estas reflexiones sobre el sistema educativo. No será la última pero sí la que cierre esto del para qué cómo, qué...