martes, 7 de abril de 2009

GENERACIÓN X

Ayer vimos el anuncio: en no sé qué cadena de televisión pasan un bodrio de película llamada Todo es mentira (Fernández Armero, 1994) y de pronto: hey! Te acuerdas? Somos la Generación X !!!! Es lo que pasa con las marcas, pasan de moda, y hay que inventar otras nuevas. A algún sociólogo aburrido (ya sabes esos tipos que inventan nombres y luego buscan dónde aplicarlos) se le ocurrió la necesidad de catalogar a los estadounidenses nacidos en los años setenta por aquello de vender libros en el país donde cualquier hombre compra cualquier libro, y de ahí a la megalomanía del concepto un paso. De repente música X, televisión X, escritores X, lo que hasta entonces había definido a la industria del porno nos englobaba a todos aquellos que habíamos cometido el error de nacer en los setenta, y no sólo en Estados Unidos, las colonias también participamos. De ahí el rollo ese de Todo es mentira, peliculita horrible protagonizada por la Generación X del cine patriótico: Penélope Cruz, Coque Malla, Jordi Mollá, Gustavo Salmerón, Mónica López, Aridana Gil, en fin, lo más de lo más del cine made in Spain, hasta el director era el culmen del cine X en su versión más soporífera, de hecho poco más ha vuelto a realizar Fernández Armero, algún episodio de El Síndrome de Ulises, ya ves.
Todo es mentira es la respuesta española a la película oficial de la Generación X, otro bodrio llamado Reality Bites (Stiller, 1994) Dirigida por el siempre irritante Ben Stiller y protagonizada por Wynona Rider, Ethan Hawke y Steve Zahn, entre otros, narra la historia de varios veinteañeros en plena crisis de la adolescencia, adolescencia?, veinteañeros? Sí eso es la Generación X.
El término está relacionado con el título de una novela de Douglas Coupland llamada Generation X: Tales for an accelerated culture, de obligada lectura en los noventa, por supuesto, en la que un grupo de jóvenes veinteañeros son definidos como cínicos, apáticos y eternos adolescentes, aficionados a los video juegos, la televisión, la música estridente y el sexo. El equivalente literario español sería ese rollazo de Historias del Kronen, con la que ninguno de nosotros, por cierto nos sentíamos identificados.

La Generación X es también, ya que nos ponemos, la de las protestas de Seattle, los compromisos con los desfavorecidos a través de la ONG’s (trabajar gratis!!! Quién podría decirlo?) la mejor preparada de la historia (casi todos tenemos títulos universitarios) la del poder adquisitivo claramente reducido respecto de la generación anterior…

El modelo queda mejor definido, en cuanto a cine, en Singles (Crowe, 1992) en la que otro grupo de veinteañeros muestra una escala de valores un tanto más elevada, y una actitud un tanto más inconformista, que en la de la película de Stiller, aunque no deja de ser otra visión, un tanto edulcorada del American way of life con el que, en definitiva, la Generación X no se sentía cómoda. Matt Dillon en Singles y otros como Kurt Cobain le dieron una imagen también: el estereotipo del desencantado, el outsider, el incomprendido. Ni que decir que no deja de ser un estereotipo y, por mucho que nos dejásemos el pelo largo, la barba de varios días, la mayoría apenas era fruto de una moda y no de una verdadera conciencia crítica.


Matt Dillon con estética grunge


Mientras en Estados Unidos, el ámbito es claramente el de personas nacidas a comienzos de la década de los setenta, en España coincide con los nacidos en la segunda mitad de esa década, los actuales treintañeros, muy bien vistos en este corto de Guillermo Cruz y Santiago Cirugeda.





Por cierto, sabias que hay una Generación Y? Otro día te cuento.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Me paso a la generación x por el forro de la tangente, que valores tengo, dirían, y si no les gustan...tengo otros.

¿Jóvenes incomprendidos? Creo que yo nunca fui uno de ellos, como tú, supongo, más bien fui uno que nunca comprendió al resto, al "botaratismo",la ética holgazana. Se buscan desenmascaradores de la impostura. Yo he enviado mi curriculum.

¿Quién de vosotros sigue siendo un rebelde?¿Qué es un rebelde? Yes, we can...not. Como dijo Penélope.

Desde Karlsruhe con amor...que alguien me diga cómo diablos se crea un usuario.

J. Oliva dijo...

Yo no lo diría mejor, Ricky, la idea es colocarnos un supuesto espejo y si no nos vemos reflejados en él, transformarnos a nosotros, no modificar el espejo. Pero ya ves qué pronto se olvidan, somos otro tipo de consumidores con lo que ahora ya no generación X, ahora generación Y, y así hasta que se acabe el abecedario, supongo.
Gracias por pasarte por aquí, hacía ya tiempo. No necesitas crearte un usuario, ya eres bastante singular...
pero si quieres que tu nombre quede reflejado no tienes más que seleccionar la opción Nombre/URL.
No dejes de pasarte por aquí, siempre eres bienvenido.
Un abrazo.

Escrito en la pared dijo...

Hoy me has tocado la fibra sensible, y nada que ver con que sea jueves santo... Vale que Todo es mentira no sea la octava maravilla, pero es de esas películas que en su día (por el uso que haces de las estructuras del castellano deduzco que no la viste "en su día") tuvo su valor para mí (el resto de cosas de Armero no valen un pimiento, eso es cierto) como ¿post-adolescente?.

Y si mencionas Singles ya ni te cuento, mi película favorita durante años, con ese pedazo de banda sonora (¿no le hincaste el diente al grunge tú?) y esas parejas, esa Kira Sedgwick que me tuvo enamorado meses, incluso esa Bridget Fonda. Un gran clásico a estas alturas.

Coincido en que Reality Bites apestaba (solo hay que ver el peso exagerado que tiene My Sharona y como rematan la película con algo tan patetico como el personaje de Stiller, la tonadilla esa de Baby I Love Your Way).

Por cierto, de aquella época es también Clerks y Chasing Amy, que definitivamente son infinitamente mejores que Dogma, chaval. Ya lo hablaremos, pero tela, tela, tela. ¿Alanis Morissette Dios? Vamos, ni Coque Malla. Que hubiesen fichado a Lou Reed por lo menos...

Una brazo!!

J. Oliva dijo...

Vaya!!! Nunca pensé que realmente te gustase Todo es mentira. Cierto que hay películas que nos llegan porque coinciden en un momento muy concreto, supongo que si la revisitas ahora ya no te parecerá tan buena. A mí, por entonces, me tocó mucho la fibra sensible Cosas Que Nunca Te Dije, no dejo de recomendarla. Singles, ya lo he dicho, me resulta entretenida, simpática si quieres, mucho mejor, desde luego, que la peli oficial del momento, supongo que quince años después, no seguirá siendo tu película favorita.La banda sonora es fantástica, algunas interpretaciones también. Es cierto que por algunas películas no pasan los años, pero me temo que Singles, y por supuesto Todo es Mentira, no son de esas. Con todo, también sigo recomendando Singles para los chicos de tercero, cuando hablamos de Geografía Urbana.
La entrada iba más bien sobre las etiquetas. Coincido con Ricky en lo absurdo de las etiquetas, en la necesidad de evitarlas, recuerdas el concepto tribu urbana?, en qué tribu nos colocamos? Pues eso.