miércoles, 23 de julio de 2008

LO PODRÍA TITULAR TÚ

Ricardo Martínez Fischer me envió esto, de cuando le daba por escribir. No perdáis detalle, realmente interesante, mejor que el mismo Quijote. No en vano, él es un Quijote trasnochado. Ya me contareis qué os parece, y le pedimos que envie más.





Lo peliagudo de llamarse distancia o un lunes de Mayo (parafraseando al gran poeta) por la noche es lo mismo, son las palabras permanentes ahogadas en tinta si no pienso que no hay océano entre mi retina y sus vacaciones de primavera, cuando al abrigo de una plaza sombría la encerraba en un marco eterno aquel indio de dedos largos. Meditar se hace entre una sonrisa y un techo blanco ahuyentando los aullidos del pasado, que volver a ser lebrel sin mácula es un trajín sólo para elegidos, cuando yo siempre decía “mañana se me ocurrirá algo” y concluía la escena sesteando sobre dos nenúfares trémulos en una apacible laguna de cuento, perdida entre la consciencia y sus besos en papel, al socaire de la áspera realidad.

Para mí la eternidad fue ni siquiera un día con su noche y sus susurros efímeros la inmortalidad de un tonto. Una noche volví a aquella plaza y encontré un recuerdo tirado en el suelo que llevaba su nombre y decía que la vida son tres parpadeos y medio. Sólo hubo un adiós. Y a la mañana siguiente al albor de un rojo intenso, por ejemplo, se contiene la risa sin saber a qué sabe, si huele a futuro, o a lo mejor a la siniestra, o tal vez otro día nos vemos al margen del universo, si mientras llamaba a mi puerta yo volvía de la última guerra que no era más que quitarme los nervios con juegos de brujería y fue menos que un intento de despedida. Entonces supe que el tiempo y el espacio son versos alejandrinos en el idioma de Shakespeare, con los que nunca pude cantarle una nana, enrrollados en papiro entre el pico de una paloma y mildoscientos cincuenta y cuatro kilometros, desde cualquier poema de los Hermanos Machado hasta los cuentos de Charles Perrault. Y ahora no tengo miedo a rascarme los recuerdos de cuando osaba conquistar Alejandría antes de gotear de su hilo de voz una lágrima parisina que entendió antes que nosotros mismos que el sueño de un Lunes de Mayo por la noche agonizó un Martes por la mañana y pereció estrangulado en la distancia un Miércoles aún por venir.
Ricardo en Barcelona (para los que no le conoceís)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

muy...apretado.


Pero no está mal, no me disgusta.

Ricardo Martinez Fisher, seas quien seas, esperamos un segundo punto de crítica, de entretenimiento, de sorpresa y sin duda de poesía.

Así que,

¿para cuándo otro?

J. Oliva dijo...

apretado? Así lo envió el autor y no me atrevía a colocar un punto y aparte. De todos modos, ahí va la nueva versión con su consentimiento y una preciosa fotografía suya.
Gracias por tu comentario, podrías haberte inventado un nombre, seas quien seas,(?) ya hay demasiados anónimos.

Anónimo dijo...

Quijote trasnochado y romántico alemán o alemán romántico como quieran ustedes.

Fumaría en pipa si fumara, llevaría capa si volara,
me gastaría todo el dinero si lo tuviera,
dejaría pasar primero a una dama, si conociese a alguna,
me despeinaría, acaso si alguna vez
he ido peinado,
me sentaría en el banco de un parque a leer a Nietzsche,
mientras los matrimonios pasean
con sus hijos hablando de la crisis,
si supiese quién demonios era Nietzsche.

Venga julio, sigue deleitándonos con tu grácil y afilado verbo.

Firmado: Fischer

Anónimo dijo...

Oye..qué animado está esto!

qué fiestón!

¿de dónde has sacado tanta gente?

:)

Y qué de cosas has escrito...

y ésta genialidad?? me gusta mucho el texto...¿te hacen la competencia los amigos señor profesor?

Y...ay...ay...no será...


¡¡¡¡¡qué emoción!!!!!


Me gusta mucho lo que has escrito trasnochado romántico alemán.

ich hoffe dir häufig sehen dieses blog...

entschuldigung, mein Deutsch es geht zu schlechterem jeden tag...ich spreche wie die Inder!!!!