CAFÉ SOLO

Y de pronto deja de llover justo cuando, en la mesa del fondo, ella se levanta precipitadamente ante la atónita mirada de su pareja, y alguien dice “recuerda” un segundo antes de que el silencio y las miradas que siempre aparecen en estos casos te sorprendan como a ella el camarero que solícito interroga, a la manera de las máquinas expendedoras, como a su pareja que ahora se levanta casi en sordina, y en sordina, los mismos rumores de hace seis años y el mismo café donde entonces eras tú quien, entre silencios y miradas y un pasaje para Burdeos, huías hacia adelante evitando encontrarte con sus ojos que, como hoy, te miraban esperando, sin entender, una respuesta.
Y de pronto deja de llover y te muerdes la lengua hasta sangrar y Plaça Sant LLuc es un cementerio de autobuses y peatones y charcos, de esperas para cruzar, de esperas para que gires el rostro y lo giras y ella y otra vez el camarero “¿desea alguna cosa, señorita?” Y sus ojos como sus ojos hace seis años, como los ojos que te hacen gritar cada noche de insomnio y tabaco, como los ojos que, por qué negarlo, viniste a buscar, sin querer encontrarlos, pero tu mala suerte, o su pareja tomando su mano dulce tan “no te preocupes, mi vida, todo va bien”, y al camarero “¿qué le debo?” mientras ella espera la respuesta en tus labios, una disculpa, admites, o trescientas veinticinco, una llamada, una postal, un te quiero de vez en cuando, la sonrisa que le prometiste o un poema o solamente quedarte a su lado, así, con el brazo sobre los hombros, con la completa seguridad de que todo va bien, mi vida, no te preocupes.
Y sonríe triste dejándose reconfortar, seis años dan para tanto, por esa extraña sensación de cansancio que siempre dejan los sueños mal dormidos, los pasos en la distancia. Y hasta se permite darte un beso en la mejilla de su pareja que ya cierra la puerta del café tras de sí y busca las llaves en un bolsillo marrón y abre el paraguas de las cosas que suceden aunque tú no las escribas.

Aquesta nit. LAX'N'BUSTO

el video es obra de Joel Godia y Angel Buil