Cuatro días de intensos bombardeos y la preparación de una operación terrestre da para mucho comentario, con lo que no insistiré en las obviedades. Da para comentarios, incluso, basados en la más absoluta desinformación, en lugares comunes, en prejuicios varios, que no resuelven, ni ayudan, ni explican. Ciudado! no caigamos en la retórica fácil. El lunes publicaba Barak Ravid en Haaretz, el diario de mayor difusión israelí, un interesante artículo desmontando las falsas informaciones difundidas por el gobierno de Israel para justificar la injustificada oleada de ataques sobre Gaza, ese mismo día la Unión Judia Francesa por la Paz apuntaba al silencio cómplice de la UE y los Estados Unidos como detonadora de esta nueva situación de crisis, instando a una rápida actuación para detener los ataques, a su vez el Partido Comunista de Israel, junto a otras formaciones y movimientos de izquierda, organizaba una manifestación de protesta por las calles de Tel Aviv exigiendo el alto el fuego y la creación de una plataforma internacional que garantice la paz en la zona.
Las elecciones generales israelíes están convocadas para el próximo mes de febrero y ya sabemos que, desgraciadamente, el incremento de la volencia otorga un importante número de votos a los partidos más radicales de Israel. Las elecciones en Israel siempre las ganan los mismos aunque militen en partidos distintos, y siempre las pierden los palestinos... y el pueblo de Israel, que con gobernantes como los que tiene nunca obtendrá la paz y la seguridad que les prometen sus corruptos dirigentes de manos ensangrentadas. Estoy seguro de que llegará el día en que el pueblo de Israel diga basta. Es hora de que nosotros, con ellos, digamos basta a los dirigentes de Israel.
La ofensiva sólo provoca muerte y destrucción, pero sobre todo, legitima a Hamas y a quienes se presentan como salvapatrias. La respuesta, como siempre, está en los libros. Si le dedicasemos más dinero a la educación y muchísimo menos a los ejércitos ya a alguien se le habría ocurrido releer a Kavafis
Esperando a los bárbaros. K. Kavafis
¿Qué esperamos aquí, en la plaza reunidos?
A los bárbaros, que hoy llegan.
¿Por qué tal calma en el Senado?¿Por qué los senadores, sentados, no legislan?
Porque hoy llegan los bárbaros.
¿Qué leyes van a hacer los senadores?
Los bárbaros ya nos darán sus leyes cuando vengan.
¿Por qué el emperador se levantó tan de mañana y se sienta en su trono, ante la puerta mayor de la ciudad ciñiendo la corona?
Porque hoy llegan los bárbaros.Y el emperador espera para recibir a su jefe.
E incluso tiene listo un pergamino para dárselo en el que ha escrito muchos títulos y nombres.
¿Por qué nuestros dos cónsules y todos los pretores salieron hoy con sus togas recamadas y rojas?
¿Por qué llevan brazaletes con tantas amatistas y anillos con brillantes esmeraldas cristalinas?¿Por qué empuñan hoy bastones preciosos de oro y plata tan ricamente cincelados?
Porque hoy llegan los bárbaros, y estas cosas deslumbran a los bárbaros.
¿Por qué los buenos pretores no vienen como siempre a decir sus discursos, a hablar tal como suelen?
Porque hoy llegan los bárbaros y a ellos no les gustan retóricas y alocuciones.
¿Por qué ha empezado de improviso esa intranquilidad y esa confusión? (Los rostros se han tornado todos graves.)
¿Por qué se han vaciado tan de prisa las calles y las plazas y todos regresan a sus casas tan cabizbajos?
Porque se ha hecho de noche sin que lleguen los bárbaros y algunos que han venido de la frontera van diciendo que ya no existen bárbaros.
Y ahora, ¿qué será de nosotros sin bárbaros?
Esta gente eran de algún modo una solución.
Peace Train. YUSUF ISLAM
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