lunes, 15 de junio de 2009

GENTE CORRIENTE

La familia modelo americana, clase media acomodada, universidad renombrada con gran equipo deportivo, otoño idílico en Nueva Inglaterra. El juego de las apariencias, del qué dirán, del no nos lo podemos permitir. Calvin y Beth son los padres perfectos de sus hijos adorables, la envidia de la vecindad, las noches en el teatro. Pero la muerte accidental del hijo mayor es el detonante perfecto para la explosión de realidad en la que se ven envueltos. La historia comienza justo cuando Conrad, el hijo pequeño, vuelve del centro psiquiátrico, en el que estuvo ingresado tras un intento de suicidio, abrumado por el sentimiento de culpa tras la muerte de su hermano (Conrad no destaca en la universidad, no es un ídolo deportivo, no es el encantador niño de mamá que sí era su hermano) De nuevo en casa se topará con la indiferencia de su madre incapaz de superar la pérdida de su hijo y la vergüenza que para su educación tradicional supone el internamiento de Conrad. Calvin, por su parte, intentará restablecer las rotas relaciones familiares mediante una aparente, y nada creíble, normalidad.

Se me ocurrió, confeccionando la lista de películas aconsejables para mi clase, que Gente Corriente (Redford, 1980) era más que recomendable de obligada visión en este mundo de los Jonas Brothers y el Disney Channel. Fantástica interpretación del gran Donald Sutherland, y de Mary Tyler Moore (ganadora del Oscar a la mejor interpretación femenina) el propio Robert Redford y la película también se llevaron el Oscar al mejor director y a la mejor producción de 1980.


2 comentarios:

Escrito en la pared dijo...

Juro que al ver lo de la familia americana ni he reparado en el título de la entrada y he pensado "qué bien, julio hablando de The Squid And The Whale". Si no la has visto ya estás tardando. Momento mítico ese en el que uno de los hijos toca una canción de Pink Floyd (Wish you were here, tal vez) diciendo que la ha compuesto él, y hasta lo justifica, creo recordar.

Escrito en la pared dijo...

Se me olvidaba.