viernes, 29 de agosto de 2014

AQUÍ ESTAMOS

En la facultad de periodismo (cursé varias asignaturas sueltas mientras estudiaba Historia) hacíamos un ejercicio que consistía en predecir noticias. El objetivo era identificar esas noticias que se repiten cada año (tienen un nombre que ahora no recuerdo) para tenerlas listas cuando llegase el caso. El verano es un momento muy propicio para estas noticias (en serio, cómo se llaman?) los incendios, las vacaciones de los ministros, los atascos en las carreteras que van a la playa...mi entrada anual quejándome de las vacaciones en el pueblito, mis ingeniosos e irrefutables argumentos en contra de vivir en un pueblito, serían una de esas constantes, de ahí que, esta vez, no haya entrada de esas, ahora bien te remito a las de años pasados porque mi postura sigue siendo la misma. La misma exactamente no porque ahora mismo he vuelto con un terrible dolor de espalda fruto, sin duda, de que cada vez hay un año más que aguantar.
Por desgracia, otra de esas noticias recurrentes en los últimos veranos son las que hacen referencia a los cotidianos bombardeos de Israel sobre Gaza, lo que lejos de ser  un error estratégico no son más que la forma que tiene el gobierno israelí y Hamas de perpetuar sus posiciones, no en vano, ayer mismo tanto el primer ministro Netanyahu como uno de los líderes de Hamas se manifestaban apuntándonse la victoria sobre las ruínas de los habitantes de la Franja. Y ambos tienen razón. Los bombardeos fortalecen a Hamas que se presenta como víctima ante el pueblo que es destruido por su ceguera política mientras el gobierno israelí se presenta como protector y garante de una seguridad que es insegura debido a sus propias políticas (recuerda esta misma primavera las manifestaciones en Jerusalén contra los recortes económicos de este mismo gobierno ahora victorioso) Ambos, Hamas y el gobierno ultra de Israel son los mismos en diferentes bandos a la espera de los bárbaros que profetizaba Kavafis.
Noticias rutinarias de verano que mantienen el gustillo por la rutina del resto del año, rutina que ya la semana que viene vuelve, entradas del blog incluídas, en las que te contaré sobre Expoesía, que estuvo bastante bien, y merece fotos y comentarios propios.
He estado leyendo este verano pero no he escrito nada, como era previsible, luego la novela deberá ser retomada con fuerza si quiero que a finales de año pueda empezar a corregir. Volví a correr, también, unos 5 kilómetros al día (no te emociones, la mitad era cuesta abajo y la otra mitad en un suave llano) pero, mira, adelgazé unos kilos que ya he vuelto a recuperar a base de grasas saturadas sabor a limón.
Echaba de menos esta rutina de escribirte y contarte, como echo de menos comenzar las clases, más que  nada para organizarme de nuevo, en un nuevo centro, con nuevos alumnos, y nuevos compañeros, (a esto sí que no me acostumbro) y poder organizar a Nicolás también que está completamente asalvajado (otra de esas cosas de los pueblos) y mañana tengo previsto llevarle al Arqueológico a ver si se me duerme un poco con la clase de Historia. (ahórrate el chiste)
Mañana justo que comienza el mundial de basket. Acuérdate que el de fútbol me llevó a tener que leer comentarios fascistoides por parte de algunos alumnos, ahora podré comentar en twitter sin sentirme un facha por animar a España, sabiendo, además, que las victorias no conllevarán riadas de estúpidos por las calles gritando que son españoles, que ya bastante vergüenza eso de la Marca España (ahora se han inventado una nueva forma de elegir alcaldes, ya comentaremos también)
Pues eso, que nos ponemos en marcha de nuevo
aquí estamos
para lo que quieras




1 comentario:

Anónimo dijo...

Vaya, vaya, qué bueno, con fuerza. Bienvenido y bienhallado