viernes, 16 de abril de 2010

VOLVER A EMPEZAR UN MARTES POR LA TARDE

No sé qué me pasa últimamente pero cada vez que voy estoy volviendo.(creo que algo así dice el personaje de Antonio Ferrándis en Volver a Empezar. Tengo que escribir algo sobre esta peli algún día)
El martes las chicas (mis chicas) del equipo de baloncesto del instituto jugaban el partido por el tercer y cuarto puesto de los Campeonatos Escolares contra las chicas del Palas Atenea de Torrejón de Ardóz. El partido se jugó en La Nevera, la mítica cancha del Ramiro y como me había perdido los partidos anteriores las chicas insistieron en que acudiera al partido, de hecho fuí el único profe que representó al instituto mientras que el Palas Atenea llevaba hasta una cohorte de fans y todo.
La sensación de volver a empezar ya apareció en el metro, camino del Ramiro. Bajar Serrano. Girar a la derecha. Me colé en el Magariños donde iba a empezar la final justo después de que las chicas del Ramiro en categoría juvenil, (mis chicas son cadete) perdiera la final de su categoría con el Alameda de Osuna. En el equipo del Ramiro jugaba Rebeca una antigua alumna y en la grada, una vez que Ignacio me descubriera, unos cuantos ex alumnos que se acercaron a saludar para insitir en la idea de eterno retorno en el que no sólo se repite el argumento sino las situaciones, los diálogos, las mismas sensaciones.
Bajé a La Nevera donde mis chicas perdieron el bronce pero ganaron esa sensación de jugar en una cancha mítica, unos recuerdos formidables y la posibilidad de decir que quedaron cuartas de Madrid, lo que no deja de ser todo un logro para un equipo sin ninguna experiencia competitiva.
Por mi parte, tras el partido estuve enseñándoles a las chicas el instituto, la parte visible un martes por la tarde. Les señalé la ventana que comunica la cancha con el departamento de Historia, donde me pasé casi todo el curso a base de Filosofía de bolsillo con Choza y Donje, la cafetería, las pistas donde estaba entrenando algún equipo de la cantera de Estudiantes. Nos lo pasamos genial pese al resultado del partido.
De vuelta, volví a llamar a Mari como en esos días en que salía de clase y camino del metro le preguntaba qué tal su día.Qué tal ha ido??? Hemos perdido, pero aquí estoy llamándote de nuevo.
El Alfonso Moreno de Brunete es un centro estupendo, con unos alumnos fantásticos y unos compañeros formidables, como la mayoría de los centros en los que he dado clase, la diferencia está en que un instituto es el lugar donde trabajo mientras que el Ramiro es mi casa.

2 comentarios:

raulsanchezgarcia dijo...

Estoy deseando leer lo que tengas pensado escribir sobre Volver a empezar.

J. Oliva dijo...

Hoy Aejandra, de 3º B, me ha señaladoque me paso las clases augurando temas interesantísmos para debatir y que llegado el momento no comentamos nada. No pasará con Volver a Empezar, un día estos...